Delfín Salas, por Enrique Campiña

En una actualización de 9 de Julio de 2010, hablé por primera vez de Delfín Salas, uno de los pioneros de la moderna ilustración militar en nuestro país. En aquel artículo mencionaba la dificultad que había tenido a la hora de en encontrar información acerca de este artista. Pues bien, con el fin de complementar aquella primera biografía, he decidido plasmar en este espacio el texto de Enrique Campiña -otro artista de la ilustración militar- publicado a finales de los 70 en la extinta revista Arte y Milicia, y que nos acerca un poco más a la vida y obra de Salas.

En Delfín Salas se da la envidiable conjunción de su juventud y la madurez artística, fruto posiblemente de unas excepcionales dotes como dibujante, un aprendizaje orientado desde la infancia y una labor sorprendentemente intensa.

Hijo y nieto de dibujantes, Salas, el teniente Salas, lleva en la sangre el arte y la milicia, y ha esta profesión a quien sirve con sus pinceles con fidelidad y amor.

La obra de Salas es amplia y diversificada, pero su común denominador es la representación plástica de las virtudes inherentes a la profesión militar: el valor, la disciplina, el sacrificio, etc…, y de la tradición, que encadena todo ello con la historia gloriosa de los Ejércitos.

Por eso no se debe de dejar a un lado, a la hora de enjuiciar su obra, su calidad y vocación de Uniformólogo, con la que se integra en ese grupo de dibujantes que desde dentro o fuera de la profesión militar tratan de divulgar en España y en el extranjero la historia de nuestros uniformes.

La labor artística de Delfín Salas no es fruto de la improvisación. Sus estudios le llevaron a ejercer como profesor de la Escuela de Artes Aplicadas a Restauración. Colaboró en revistas profesionales y, como tantos otros dibujantes, templó sus armas en el duro templo del comic para publicaciones extranjeras.

En la pintura, sus obras, casi siempre de tema militar, se han colgado en numerosas exposiciones, ganando en 1969 el Premio Especial de Pintura de la Jefatura Provincial del Movimiento y en 1974 el Premio Ejército. Dibujos suyos se exhiben en el Museo de Sacramento (EEUU) y en el de Las Casas Reales de Puerto Rico.

Como es inevitable, en su pintura, fuerte y realista, destaca notablemente su capacidad como dibujante, que quizá minimice otros positivos valores plásticos.

Las postales de uniformes que Salas realizó para el Centro de Ayudas a la Enseñanza son bien conocidas a nivel profesional, y actualmente trabaja en otra serie de láminas para el Servicio Geográfico del Ejército, para lo que puede ser una importante historia iconográfica de los uniformes españoles.

Hoy, Delfín Salas Carmena es ya una figura importante en la pintura militar, y todo parece indicar que lo será aún más en un futuro próximo.

Enrique Campiña